Amor de Madre

Cuando nacemos somos uno con la existencia, la pureza emanando de nosotros, resplandor, belleza, fluyendo un amor tan puro que a una “madre” le penetra de tal manera que en ese instante en que lo ve es cuando realmente su mundo cambia, se despierta en ellas una sensibilidad que sobrepasa el entendimiento, es por esto que se considera el amor más puro.

“Supe que realmente no amaba a mi mamá y sí que ella me amaba a mí, el día que fui madre”  (Palabras de una sabia hija; Una sabia madre)

Es porque nuestro mundo ya no es el de uno solo, el de nuestro ego sino que desde ese momento entendemos que nuestra consciencia se comparte ya no pensamos en nosotros solamente. Ver a ese ser tan indefenso, tan puro solo puede inspirar amor, ternura, empatía protección. Hemos hablado de la importancia de traer a consciencia a nuestro niño interior, una de las razones es esta “dejarse amar” un niño no lucha en contra del amor, el niño es y tú no puedes más que amarlo.

Pero hoy es en el lugar de la madre donde quiero que nos pongamos, quien es madre o padre es posible que se le haga más simple. Pensemos con corazón de madre, que pasaría si a todo ser vivo lo vemos como hijo, con amor puro, protector. Dos cualidades importantes en el círculo de la vida –todos seamos madres, todos seamos hijos- (por hijos me refiero a ser como niños). Entonces el otro no será menos o más que tú, si no como igual (Si una madre comparte la consciencia con su hijo que no habla que aprende a expresarse, ella tiene que colocarse en el lugar de él; (por que llora, que le alegra, que me pide) el niño no sabe cómo se llama lo que siente y la madre tiene que ponerse en su lugar y decirle estás feliz, estás llorando, estás triste, tienes hambre, de ésta forma el aprende. En ese momento en que la madre deduce lo que el niño siente lo llamaremos “empatía”.

Ponernos en el lugar del otro con una sutileza tal, que el otro se sienta comprendido. Para poner a funcionar la empatía en nosotros, buscamos en nuestra propia experiencia (Seguro les ha pasado que un amigo o una persona cercana, les ha contado una situación que de algún modo les está afectando, nosotros inconsciente o conscientemente buscamos en nuestra memoria alguna experiencia similar, para poder decir al otro una respuesta; como la que nos gustaría escuchar, o que alguien uso en determinado momento y nos ayudó). Aclarado lo que es ser empático, pensemos que tipo de madre soy.

Todos los días tenemos experiencias nuevas, no cada hoy estamos de humor para sonreír, así como a ti te pasa le puede pasar a muchos de los que se cruzan en tu camino. Tengamos esto en mente y consideremos lo importante y significativo que puede ser dar un saludo correctamente, desearle buen día a una persona sin importar su proceder, sin importar el color o el status somos seres humanos, sentimos nos preocupamos y nos alegramos por cosas similares; por que esperar que el otro haga más o decir tu hiciste menos si podemos hacer y ser iguales, “cuando tu como jefe mandes a tus empleados no lo hagas como si fueras más que ellos, hazlo como si tu fueras él empleado, cuando tu jefe te mande, tu como empleado no te quejes y piensa como jefe”. Al caso tal que lo que hagas sea no solo con amor y dedicación si no respeto es una de las cosas que más valoramos  y nos gusta recibir “Ya hemos escuchado respeta para que te respeten” y aun así lo exigimos y no siempre lo damos; se han preguntado ¿Por qué pasa esto?

En un trabajo, la familia o la vida en general; existen rolles que debemos cumplir, pues todos somos hijos, aunque no todos tengamos la oportunidad de vivir con ambos padres o con ninguno, no podemos negar que siempre hay alguien que bien o mal nos enseñó, y fue como un padre o madre así que más allá de la relación sanguínea; todos somos hijos y yo hoy te digo todos podemos ser madre sin referirme al género o la cantidad de personas que procrees, si no a la acción de amor. Así que en el roll que desempeñemos como lavaplatos, empresario o vigilante no sea un obstáculo para ser “madre” y que al que hoy te encuentres lo veas como un hijo al que respetas.

"Al principio tendrás que usar la imaginación pero poco a poco sentirás que tocas la realidad con la imaginación" (Osho)